19 de julio de 2015

Protégete de vampiros energéticos.

Hoy quiero hablarte de algo muy común como es el vampirísmo energético, esto es, personas que roban la energía a otras ya sea, de forma consciente o inconsciente. Es una práctica más común de lo que se piensa y el no creer en ella no defiende, en absoluto, de sus efectos nocivos. 

No importa cuantos años conoces a alguien,  ni tampoco el tiempo que estés junto a ese ser, sabrás que ha absorbido tu energía vital si te sientes cansado o débil, tras compartir una conversación o un espacio con esa persona.

Corte de lazos energéticos

 Formas o métodos de absorber energía:

- Buscarte para contarte sólo sus problemas, lo suyo siempre es más, se comporta como víctima de otros, y magnifíca cualquier dolor, caída, dolencia, etc, para provocar  lastima y compasión. Generalmente, no hace nada para salir de esa situación y tampoco quiere reconocer su responsabilidad en las cosas que le suceden.

- Confundirte, te hace perder claridad mental hablando con él y tu mente se siente aturdida. Te baja la autoestima humillándote, o juzgando duramente tus opiniones y propuestas, hasta conseguir que vaciles o cambies decisiones que habías tomado con anterioridad.


Esta forma de vampirismo es la empleada también por algunas parejas que como la araña, enganchan en su tela al  compañero/a y víctima. El abuso consiste en detectar los fallos del consorte y explotarlos, para provocar un retroceso en su personalidad. Son relaciones en las que de un modo muy sutil, uno manda y el otro obedece. La parte dominante siempre está libre de responsabilidades, lo malo siempre está fuera, nunca en él. Sabe manejar a su otra mitad haciendo que se sienta culpable, quedando  el/ella exento de responsabilidad. 
Ejem: Si te vas, tendrás sobre tu conciencia el que me suicide.

Para defenderte de este tipo de sanguijuela energética te propongo este ejercicio:

La Torre de Luz

Ser de luz

Esta protección se hace de pie.

Respira profundamente, te relajas y dejas los brazos caídos.


Te imaginas dentro de una elipse de luz azul intensa y brillante.
Dentro de la elipse hay por encima de tu cabeza, sin tocarla, flotando, una bola de luz blanca.
La bola empieza a arrojar destellos de luz blanca que te inunda de la cabeza a los pies, estas totalmente cubierta de luz blanca y por fuera sigues estando envuelta en luz azul.


Mantén la figura unos minutos, las dos esferas protegiéndote y después dejas que desaparezca la imagen poco a poco.


Para fortalecer esta protección puedes visualizar a la altura del tercer ojo, un símbolo espiritual, el que quieras, de color azul.


Esta protección la puedes repetir varias veces al día, sobre todo cuando te sientas amenazado y es bueno hacerla antes de irte a la cama y al levantarte.

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